Mikel era empleado de los autobuses públicos de Donostia – San Sebastián cuando fue retenido, torturado y asesinado en 1985. El suceso, que estuvo en el centro del debate político, provocó una gigantesca movilización social en Euskal Herria, hasta el punto de que se produjeron numerosas manifestaciones y una huelga general. Entre esas acciones, durante los 20 días en los que estuvo desaparecido, la protesta de sus compañeras y compañeros fue icónica. «Aquí no hay conductor, ¿dónde está?» decía la pancarta colgada del autobús que le llevaron hasta el ayuntamiento donostiarra.
Después de 40 años recuperaremos aquella acción. En las fechas comprendidas entre el 26 de noviembre y el 14 de diciembre, fechas entre las cuales estuvo desaparecido Mikel y apareció en el río Bidasoa, un autobús recorrerá parte de Euskal Herria, uniendo Orbaizeta, Pamplona, Bortziriak, Altza y Donostia. Con el objetivo de dar a conocer el caso, el autobús tendrá una exposición en su interior. Y, a nivel local, organizaremos diferentes actividades en torno al mismo. La dinámica finalizará el 14 de diciembre con un acto central en Donostia.