Cuarenta años aquí, sin interrupción

Hoy nos hemos reunido de nuevo en la fábrica de Orbaizeta, para demostrar que mantenemos viva la memoria de Mikel Zabalza. Han pasado 40 años desde que la Guardia Civil detuvo y asesinó a Mikel; que construyeron una mentira y luchamos para desmantelarla. Cuarenta años. Cuarenta eventos, acompañados de lluvia, viento, sol y nieve. Cuarenta aurresku y ofrendas florales. Cuarenta aperitivos. Cuarenta demandas de verdad, justicia y reparación.

Algunos de los que estamos aquí no supimos de primera mano lo que ocurrió; otros sí, lo vivisteis; y decidisteis recordar lo que le ocurrió a Mikel año tras año, informándonos a quienes no lo supimos. Nos toca expresaros nuestra gratitud (y a quienes no están aquí), ¡porque habeis mantenido viva su memoria!

Llevamos aquí cuarenta años. Sin interrupción.

Entre quienes no están, queríamos recordar a José Luis Molinat, quien era el párroco de Orbaizeta. Porque, al enterarse del caso de Mikel, podría haber hecho la vista gorda, pero no lo hizo. Fue valiente, sin duda, y acertó en sus palabras; sin importar las consecuencias que esto le trajo, y sabemos bien que tuvieron consecuencias, como amenazas.

Afortunadamente, hemos contado con personas tan valientes como compañeras durante estos 40 años. De hecho, gracias a sus gritos y reivindicaciones, Mikel apareció en el río Bidasoa 20 días después; gracias a sus gritos y reivindicaciones, la verdad social hoy es institucional. “A la mentira, la verdad”, dijo Molinat, y “a la tortura-violencia, la libertad-solidaridad”. Y este camino ha tenido mucho de esto último. No podemos olvidar hoy a los grupos musicales que han mantenido vivo el caso de Mikel durante todos estos años con sus melodías y letras, y que también han permitido que se perpetúe de generación en generación. Este año, la contribución ha corrido a cargo de los grupos Diraki, Apotheke y Aingura, pero también contamos con Raimundo El Canastero, Marianitoz Blai… que han sido las voces de este pueblo.

La novedad de este año es, sin duda, el autobús que tenemos aquí a nuestro lado. El Autobús de la Memoria, que es el eje central de nuestra dinámica gracias a la iniciativa de los trabajadores de Dbus y a una exposición montada con el apoyo de la Junta de Aezkoa y el Gobierno de Navarra. En esta exposición, 10 personas recuerdan momentos del caso y queremos agradecerles el esfuerzo realizado y la historia que compartieron con nosotros. Eso también alimenta la memoria. En los próximos días, el autobús estará en Garralda, Aurizberri, Auritz y Agoitz. Les invitamos a visitarlo.

Este Tour en Autobús finalizará en San Sebastián el 14 de diciembre. Los trabajadores de Dbus, como lo hicieron hace 40 años, llevarán el autobús de Cocheras al Boulevard. Por ello, queremos hacer un llamamiento especial a la gente de Euskal Herria para que den la más cálida bienvenida a este autobús que refleja la memoria de Mikel Zabalza y participen en el evento final.

En cualquier caso, el camino no termina ahí. Nos falta una parada. La de la verdad plena. La de la justicia. La de reconocer lo hecho. Deberían desclasificar toda la información relacionada con el caso. Hacer públicos los documentos que poseen es esencial para allanar el camino hacia la justicia y la reparación, y para acabar con la impunidad. Y es responsabilidad del Gobierno español hacerlo. Dicen que no tienen miedo, pero no les creemos. No pongan excusas, que la Guardia Civil y el Gobierno español reconozcan lo que hicieron. La impunidad, la ley de secretos oficiales, es garantía de repetición, por lo que es fundamental acabar con ella. Para que nadie, en ningún lugar y nunca más sufra la tortura.

Sin más dilación, sigamos alimentando el hilo de la memoria. Sigamos proclamando la verdad y la justicia para Mikel. Por Ion, por Idoia, por Mikel y por todos los que hemos sufrido tortura en el Euskal Herria, por nosotros, ¡sigamos abriendo camino!

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